Cómo cuidar tus joyas
Tus joyas merecen tanto cariño como tu rutina matutina. Aquí tienes cómo cuidarlas para que brillen todo el día, todos los días.
Que las joyas sean el toque final: primero maquillaje, perfume y desodorante, vístete y, después, ponte tus piezas favoritas para evitar que se apaguen, se enganchen o se enreden.
Acero inoxidable 316L
Nuestras joyas están hechas de acero inoxidable 316L, un metal duradero: resiste al agua (ducha, sudor, lluvia) y no se oscurece fácilmente con el uso diario.
Para el color y el brillo utilizamos baño PVD, una técnica de alta gama que fija el color con mayor durabilidad que los procesos tradicionales.
En la práctica, tus joyas conservan el brillo por más tiempo, resisten mejor los arañazos y mantienen su bonito color: perfectas para un uso diario sin preocupaciones.
Instrucciones de cuidado
- Aclara y seca después de playa, piscina o deporte (la sal, el cloro y el sudor pueden dejar marcas).
- Evita el contacto directo con perfumes, lociones, protector solar y productos del hogar.
- Limpia con regularidad con agua tibia y una gota de jabón suave; después seca con el paño de microfibra incluido con tus joyas Milona.
- No frotes con estropajos abrasivos ni pastas pulidoras (para preservar el recubrimiento PVD).
- Quítate las joyas para trabajos manuales o deporte intenso.
- Guárdalas lejos de la humedad y por separado (en bolsa o estuche) para evitar microarañazos.
Consejo: un repaso rápido con el paño de microfibra al final del día basta para mantener el brillo por más tiempo.